Bajo la dinastía de los Tang, la China del siglo VII guarda celosamente un secreto que todo el mundo ansía conocer: la fabricación de la seda. En ningún otro lugar se sabe cómo obtener esta tela tornasolada, más rara que el jade y más preciosa que el oro, que arruina y enloquece a la sociedad occidental más elegante. A lo largo de la Ruta de la Seda llegarán a China numerosas expediciones con hombres e ideas muy diferentes: budistas, cristianos, monjes, adoradores del profeta Mani... En su afán por arrancar al imperio su bien más querido, intentarán imponer sus creencias y declararán una guerra de religión nunca vista: una guerra pacífica cuyo objetivo será... la seda. En este contexto, la quinta concubina imperial, Wuzhao, una bella, inteligente y ambiciosa mujer, se convierte en la esposa del emperador Gaozong. Pero tiene dos importantes defectos a ojos de los dignatarios: no sólo es una plebeya, sino que además es budista.

Avec l’Impératrice de la soie, José Frèches réitère son incursion dans le roman historique ayant produit une trilogie dans l’antiquité chinoise quelques années auparavant. On a ici affaire à une nouvelle fresque exploitant une période clef de l’histoire chinoise puisque celle-ci se déroule sous la dynastie des Tang, à une époque où le commerce de la soie battait son plein et faisait la richesse de l’Empire.

Le Toit du monde est un tome d’exposition relativement efficace dans la mesure où il présente l’intégralité des personnages de la saga ainsi que bon nombre d’amorces d’intrigues. La Route de la soie est évidemment un des lieux clefs du roman mais celui-ci fait également la part belle aux hauts lieux du bouddhisme chinois, indien et tibétain, religion qui dominait déjà la majeure partie de l’Asie.

J’ai trouvé le roman agréable dans ce qu’il laisse entrevoir de l’érudition de l’auteur, en particulier sur la situation géopolitico-religieuse avec le chevauchement du bouddhisme, des variantes du christianisme avec les paganismes locaux encore bien enracinés. C’est malheureusement une des seules forces du livre (mais elle est de taille) puisque scénaristiquement l’auteur use de grosses ficelles et que les personnages sont aussi inconsistants que dans le Disque de Jade (l’autre trilogie écrite par José Frèches). ( )

Bajo la dinastía de los Tang, la China del siglo VII guarda celosamente un secreto que todo el mundo ansía conocer: la fabricación de la seda. En ningún otro lugar se sabe cómo obtener esta tela tornasolada, más rara que el jade y más preciosa que el oro, que arruina y enloquece a la sociedad occidental más elegante. A lo largo de la Ruta de la Seda llegarán a China numerosas expediciones con hombres e ideas muy diferentes: budistas, cristianos, monjes, adoradores del profeta Mani... En su afán por arrancar al imperio su bien más querido, intentarán imponer sus creencias y declararán una guerra de religión nunca vista, una guerra pacífica cuyo objetivo será... la seda. En este contexto, la quinta concubina imperial, Wuzhao, una bella, inteligente y ambiciosa mujer, se convierte en la esposa del emperador Gaozong. Pero tiene dos importantes defectos a ojos de los dignatarios: no sólo es una plebeya, sino que además es budista.

Typical for the first novel in a series - the problems are all set up, but there is no resolution. Not interesting enough to read two more of this length. ( )