Agustí Altisent (1923–2004)

Altisent fue monje en Poblet durante muchos años, llegando a abad. Hacia mediados de los años sesnta empezó a colaborar con artículos en diversos medios, especialmente el periódico La Vanguardia. esta es la primera recopilación de esos artículos. Nuestro monje habla de lo que le interesa, claro, sin excluir asuntos de teología, pero con cierta preferencia por los asuntos del espíritu humano. Podría parecer aburrido, pero no lo es. No solo es que los textos sean breves, sino que Altisent escribe con mucha naturalidad, y uno se lo puede imaginar a su lado hablándole con calma y acento catalán sobre esto y aquello.

Además de jugosos detalles sobre la vida en un monasterio, se me han quedado reflexiones sobre la importancia de tener tiempo y espacio para las personas, que es justamente lo que sobra en Poblet (hay un artículo sobre los pequeños monasterios modernos, constituidos en un piso, y qaue él cree que tienen una importante función, pero no es lo mismo que un monasterio clásico). Allí, por lo visto, en cada momento se dedican a lo que tienen que hacer con toda su alma, incluyendo los malos momentos o los trabajos duros, pero también los muchos buenos momentos y situaciones agradables, a las que no hay que renunciar. Todo es obra de Dios, directa o indirectamente, y todo nos lo ha puesto Él delante precisamente a nosotros para algo.

Un libro para leer sin prisa y sin necesidad de reflexionar demasiado: solo déjese llevar un rato.… (meer)