LOS MUNDOS REALES Y LOS MUNDOS IMAGINARIOS:
SOBRE LOS HABITANTES DE LOS ASTROS : TOMO II

CAPITULO PRIMERO
(Continuación.)

FIN DEL CREPUSCULO. -LA SUMA DE SANTO
TOMAS IA TEOLOGIA. DUALIDAD DEL
CIELO Y DE LA TIERRA. LoS MUNDOS DEL
EL CARDENAL DE CUSA.--HABITANTES
DEL SOL Y DE LAS ESTRELLAS. UN
INTERMEDIO DEL ARIOSTo Y DE RABELAIS.
EL ZODIACO DE LA VIDA HUMANA.

DANTE ALIGHIERI, II Paradiso, A... D. 1800

(Impreso por vez primera en 1472.)
Erase el día de Viernes Santo del año 1300
cuando descendía Dante a los infiernos, a la edad

Erase el día de Viernes Santo del año 1300
de 33 años. Recorrió todos los círculos en
veinticuatro horas, llegó al centro de la Tierra y lo
atravesó rodeando trabajosamente el gigantesco
cuerpo de Lucifer colocado exactamente en dicho
centro, subió hacia sus pies, y saliendo a
la superficie de la Tierra por el hemisferio austral,
llegó al día siguiente a la montaña del Purgatorio,
donde Virgilio le entregó a la protección
de Beatriz; después de haberse purificado en el
paraiso terrestre, hizo el viaje al cielo y penetró...

LOS MUNDOS REALES Y LOS MUNDOS IMAGINARIOS:
SOBRE LOS HABITANTES DE LOS ASTROS : TOMO I

INTRODUCCIÓN

Quisiéramos no vernos en la precisión de tener
que hablar de nosotros ya desde la primera línea;
pero, a no ser que pretendamos no dar al
público explicación alguna, nos vemos en el caso
de tener que decirle que LOS MUNDOS REALES Y
LOS MUNDOS IMAGINARIos fueron concebidos
después que lo hubo sido LA PLURALIDAD DE LOs
MUNDOS HABITADOs, y que están escritos bajo el
mismo criterio y dictados por la misma idea, los
unos y los otros. La primera razón que nos indujo
a emprender este trabajo, fué una falsa
interpretación basada por ciertos espíritus ligeros en
la doctrina de la Pluralidad de los Mundos.

Hacer que todas las luces de la ciencia converjan
en este gran punto: la vida universal;
presentarla bajo su aspecto real; fijar sus inmensas
irradiaciones y demostrar que es el centro
misterioso en torno del cual gravita toda entera
la Creación, es para nosotros un problema cuya
solución interesa a nuestra época. El que se
propusiera tratar una cuestión semejante se
colocaría frente a un ideal formidable. Ensanchar
de esta suerte hasta más allá de los limites de
lo visible el dominio de la existencia vital, por
tanto tiempo confiada al átomo terrestre;
desgarrar los velos que nos ocultaban el reino de
la existencia en la superficie de los mundos; y
permitir a la imaginación cernerse en su...