Cuando A.B. Carr, un polémico abogado criminalista, decide situar su residencia en Madison, despierta las protestas de una serie de concienciados ciudadanos. El éxito de Carr defendiendo criminales no lo convierte en el vecino ideal de Madison. Pero no hay ninguna ley que prohíba que compre una casa, aún en la zona más exclusiva de la ciudad. Pronto, Carr y el fiscal Doug Selby, se verán enfrentados ante los tribunales por un caso de asesinato. Carr usará todas sus argucias de abogado de gran ciudad y Selby deberá aguzar el ingenio para conseguir demostrar la culpabilidad del acusado.

My first reaction? Usual Gardner crap. So I decided to take a step back. Gardner, originally a pulp writer, was the master at setting up a problem or complication and keeping the pressure on until the resolution. And once everything was revealed, it perfectly explained all those obstacles and mysteries. His major fault was his hero’s deductions were pulled out of thin air. I went into this one already knowing all the answers and there was still not enough evidence infer the solution. Clearly I’m not a fan, so . . . usual Gardner crap. ( )

Good old crime story. ( )

Cuando A.B. Carr, un polémico abogado criminalista, decide situar su residencia en Madison, despierta las protestas de una serie de concienciados ciudadanos. El éxito de Carr defendiendo criminales no lo convierte en el vecino ideal de Madison. Pero no hay ninguna ley que prohíba que compre una casa, aún en la zona más exclusiva de la ciudad. Pronto, Carr y el fiscal Doug Selby, se verán enfrentados ante los tribunales por un caso de asesinato. Carr usará todas sus argucias de abogado de gran ciudad y Selby deberá aguzar el ingenio para conseguir demostrar la culpabilidad del acusado.

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